Pistola de calor, eléctrica

Características de la pistola de calor

• Potencia: Se mide en vatios (W) e indica la capacidad de calentamiento de la pistola. Mayor potencia significa mayor temperatura y flujo de aire.
• Rango de temperatura: Determina el rango de temperaturas a las que puede funcionar la pistola.
• Flujo de aire: Se mide en litros por minuto (l/min) e indica la cantidad de aire caliente que expulsa la pistola. Mayor flujo de aire permite un trabajo más rápido.
• Control de temperatura: Permite ajustar la temperatura del aire caliente para diferentes aplicaciones.
• Accesorios: Algunas pistolas incluyen accesorios como boquillas intercambiables, reflectores o raspadores.

Ejemplos de aplicación de la pistola de calor eléctrica

Soldadura de tubos de plástico

• Aplicación: La pistola de calor se utiliza junto con varillas de aporte de plástico para soldar tubos de PVC, HDPE y otros termoplásticos.
• Funcionamiento: El aire caliente de la pistola ablanda los extremos del tubo y las varillas de aporte, permitiendo que se fusionen al aplicar presión. Una vez enfriada, la unión soldada es resistente y duradera.

Retracción de tubos termorretráctiles

• Aplicación: Los tubos termorretráctiles se utilizan para aislar y proteger cables, conexiones y otros componentes eléctricos. La pistola de calor encaja el tubo termorretráctil alrededor del elemento, contrayéndolo y proporcionando un ajuste ceñido y aislante.
• Funcionamiento: El calor de la pistola provoca la contracción del tubo termorretráctil, que se adapta a la forma del objeto que lo rodea. Esto crea una barrera protectora contra la humedad, la abrasión y otros agentes externos.

Remoción de pintura y barniz

• Aplicación: La pistola de calor se utiliza para ablandar la pintura o el barniz existente en superficies como muebles, marcos de ventanas o carrocerías de vehículos, facilitando su eliminación.
• Funcionamiento: El aire caliente descompone la estructura molecular de la pintura o el barniz, haciéndolos más blandos y fáciles de raspar o pelar con una espátula o cepillo. Es importante tener cuidado de no aplicar demasiado calor, ya que esto puede dañar la superficie subyacente.